La Sala de Reconocimiento de la Jurisdicción Especial para la Paz imputó crímenes de guerra de homicidio en persona protegida y crímenes de lesa humanidad de asesinato y desaparición forzada a once personas dentro de las cuales habían oficiales y suboficiales del Ejército Nacional. En particular, los imputados participaron de manera determinante dictando órdenes para que se ejecutara el asesinato de 120 personas en estado de indefensión en el Catatumbo. Lo anterior, en el marco del Caso 03 “Asesinatos y desapariciones forzadas presentados como bajas en combate por agentes del Estado”.
Dentro de las consideraciones de los magistrados se resaltó el que los imputados actuaran de manera consciente, entendiendo que los actos hacían parte de un ataque generalizado y sistemático contra la población civil. Asimismo, se debe resaltar que estas imputaciones hacen parte del primero de seis Autos de Determinación de Hechos y Conductas.
Por último, se debe tener en consideración que los asesinatos cometidos hacen parte de un patrón de macrocriminalidad que se propició gracias a la política institucional del Ejército de incentivos y la presión que se ejercía para aumentar el número de fallecidos en combate. Al respecto, se señaló:
“La Sala de Reconocimiento pudo determinar que este patrón macrocriminal tuvo dos modalidades sucesivas que se distinguen por el perfil de las víctimas. La primera modalidad corresponde al asesinato de hombres jóvenes de entre 25 y 35 años, habitantes del área rural del Catatumbo, en su mayoría agricultores, comerciantes y transportadores informales. La segunda modalidad consiste en el asesinato de jóvenes, provenientes de otras regiones, engañados para ser trasladados al Catatumbo. A pesar de esta variación en el perfil de las víctimas, y la consecuente sofisticación del modus operandi, los asesinatos bajo estas dos modalidades persiguieron el mismo objetivo de presentarlos como “bajas en combate” por parte de los miembros de la BRIM15 y el BISAN, en el marco de la política institucional del conteo de cuerpos.”
Fuente: jep.gov.co