El Tribunal Supremo, en una reciente sentencia, determina que fijar la cuantía de un procedimiento como «indeterminada» no infringe los derechos del consumidor. Esta decisión proviene de una revisión de recursos de casación y por infracción procesal contra una resolución anterior de la Audiencia Provincial de Las Palmas.
Dicha resolución anterior confirmaba que algunas cláusulas de un contrato de préstamo bancario eran nulas, pero no se pronunciaba sobre la cuantía específica que el demandante había solicitado. Aunque el demandante había determinado la cuantía del procedimiento en 118.926 euros, el banco propuso que la cantidad se estableciera como indeterminada. Esta propuesta fue inicialmente rechazada, pero posteriormente, a instancias del banco, se decidió que la cuantía debía establecerse como «indeterminada».
Audiencia provincial: la cuantía no influía en el procedimiento actual ni en un potencial recurso de casación
La Audiencia Provincial justificó esta decisión alegando que la cuantía no influía en el procedimiento actual ni en un potencial recurso de casación. Solo podía tener relevancia con respecto a los costos del procedimiento.
El Tribunal Supremo, en su sentencia, señaló que la cuantía del procedimiento no es el núcleo de la demanda judicial y tiene un carácter meramente instrumental. Se subrayó que los litigantes no deben buscar establecer una cuantía que les favorezca, especialmente si contradice sus acciones previas en el procedimiento. Además, dependiendo de la función que cumpla la cuantía en diferentes etapas del proceso, se debe determinar en el momento procesal más adecuado.
Los derechos del consumidor respecto a la especificación de la cuantía del procedimiento en la demanda inicial
Al rechazar el recurso de casación, el Tribunal Supremo argumentó que la cuantía del procedimiento no tiene que ser necesariamente la especificada en la demanda inicial. Además, se refirieron a una decisión del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) que indica que un litigante que pierde no tiene que reembolsar todos los honorarios del abogado al consumidor que ganó. El Supremo reiteró que los costos exorbitantes pueden disuadir a los consumidores de iniciar acciones judiciales.
Los beneficios y los derechos del consumidor
Finalmente, la Corte Suprema argumentó que aumentar la cuantía, con el objetivo de incrementar los honorarios del abogado, no necesariamente beneficia al consumidor. Si el consumidor pierde el caso, terminaría enfrentando un desembolso económico significativo. Por ello, recuerdan que existe un límite en los honorarios de abogados que pueden incluirse en los costos, aunque este límite puede ser ajustado dependiendo de la complejidad del caso.
