El Supremo determina las reglas a seguir para que los administradores puedan acceder a una deducción de la retribución en el impuesto de sociedades. [TOL9.647.586 ]
En el ámbito de la legislación tributaria, la cuestión de la deducción de las retribuciones de los administradores de sociedades en el impuesto sobre sociedades resulta un tema de debate constante entre la Administración tributaria y las propias empresas. La falta de claridad en este asunto ha llevado al Tribunal Supremo a pronunciarse en varias ocasiones, pero sin lograr una aclaración definitiva.
Recientemente, el Tribunal Supremo emitió una Sentencia el 27 de junio de 2023, en la que, a pesar de estar relacionada con la normativa previa (el caso viene referido a los ejercicios 2008 y 2010), ha aportado mayor claridad en las condiciones bajo las cuales las retribuciones de los administradores pueden considerarse deducibles.
Claves de la sentencia
La sentencia establece requisitos específicos que las retribuciones de los administradores deben cumplir para considerarse gastos deducibles en el impuesto sobre sociedades:
- Registro Contable Correcto: Las retribuciones de los administradores deben estar debidamente registradas en la contabilidad de la empresa.
- Justificación Documental del Pago: Debe ser posible respaldar el pago de estas retribuciones mediante documentación justificativa. Esto implica que los pagos deben estar respaldados por documentos como extractos bancarios de la sociedad, proporcionando una base sólida para demostrar la transferencia efectiva de fondos.
- Previsión en Estatutos: La retribución de los administradores debe estar prevista en los estatutos de la empresa. Además, la forma y cuantía de dicha retribución deben estar claramente especificadas. La sentencia establece que, si los estatutos indican que el cargo de administrador es remunerado y detallan cómo debe realizarse el pago, no resulta necesario que exista un acuerdo adicional en una junta para validar la deducibilidad de estos gastos.
La sentencia también aborda la situación particular de las sociedades con un único socio, argumentando que en estos casos, el requisito de aprobación de la retribución en una junta general no es aplicable, ya que el socio único ejerce las competencias de la junta.
Esta sentencia del Tribunal Supremo establece un marco más claro y específico para la deducción de las retribuciones de los administradores en el impuesto sobre sociedades. Siempre y cuando cumplan con los requisitos establecidos y mantengan una documentación precisa y transparente, podrán deducirse.
