El Ejecutivo ha recibido la renuncia al cargo de la Fiscal General del Estado, Dolores Delgado, por motivos de salud. Fue nombrada como Fiscal General del Estado tras haber ocupado el puesto de titular de la cartera de justicia. Prometió el cargo como fiscal general ante el Rey el 26 de febrero.
La ministra ha presentado su renuncia poco después de haberse reincorporado tras una baja médica debido a una operación en la columna vertebral.
En el comunicado, se destaca la dificultad de la decisión, dado que ha tenido que conjugar “su inequívoca vocación de servicio público con un alto sentido del deber y responsabilidad, lo que le ha llevado a la convicción de que no se encuentra en las condiciones físicas exigidas para tan alta función”.
La actual Ministra de Justicia, Pilar Llop, ha valorado como un ejercicio de responsabilidad por parte de Delgado su renuncia. Destacando que ella misma ha justificado su salida por no poder desarrollar sus funciones con la entrega que el servicio público requiere.
En la reunión del Gabinete se ha aprobado la candidatura de Álvaro García Ortiz para el puesto. García Ortiz es actualmente fiscal jefe de la fiscalía técnica y fiscal de sala del Tribunal Supremo. La ministra de Justicia ha resaltado su dilatada trayectoria profesional y su perfil, ya que es «especialista en medioambiente y un referente nacional e internacional en la lucha contra los incendios forestales».
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