El presupuesto del Ministerio de Trabajo y Economía Social para 2022 es de 30.142 millones de euros. Requerirá de 2.478 (-7,6%) millones de euros menos que en 2021, ya que ha disminuido el gasto en prestaciones del SEPE, que no requerirá los recursos extraordinarios que permitieron en 2021 y 2022 hacer frente a los cuantiosos efectos de la pandemia en el ámbito laboral. El resto de partidas se incrementan en un total de 599 millones de euros.
El SEPE recibirá un total de 29.121 millones de euros y aumentará los recursos destinados a personal en un 3,65%. También crecerán un 29,73% las inversiones en digitalización para poder atender las necesidades de este organismo esencial para la protección social que afronta una transformación integral.
Se destina 22.093 millones de euros a la protección de las personas en desempleo, sumando en este epígrafe tanto las prestaciones contributivas como las asistenciales.
El IPREM se revaloriza por segunda vez en lo que va de legislatura en un 2,5% que se sumará a la anterior subida del 5%. En los dos últimos años, este indicador se ha incrementado en 41 euros.
Seis objetivos fundamentales de los Presupuestos: desplegar unas Políticas Activas de Empleo (PAE) para generar trabajo de calidad; contribuir a la reactivación económica y a la transformación verde, digital y social; mejorar el sistema de protección por desempleo; reforzar la protección de la salud laboral; articular una auténtica política pública de Economía Social y combatir las desigualdades y brechas en el ámbito laboral.