La Primera Sala de la Corte Suprema dictó sentencia de reemplazo acogiendo la demanda de rendición de cuentas de gestión comercial que la madre demandante encomendó a su hijo.
La Corte de Apelaciones de Santiago, quien emitió la sentencia recurrida, rechazó la demanda porque, a su parecer, no existió mandato de gestión entre las partes. Sin embargo, la Corte Suprema consideró que las pruebas demostraron que el demandado proporcionó su cuenta corriente para el depósito de dineros provenientes del extranjero que eran de su madre, la demandante, “lo que configuró la existencia efectiva de un contrato de mandato en términos del artículo 2116 del Código Civil, ya que la demandante confió a su hijo el recibir por ella una suma de dinero”.
En consecuencia, la Corte Suprema consideró “que la correcta interpretación y aplicación de los mencionados preceptos legales debió conducir a los jueces del fondo a acoger la acción, dado que entre las partes se celebró un contrato de mandato por el cual la demandante confió en su hijo para tal gestión, y que por ende, pesa sobre este último la obligación legal de rendirle cuenta de los dineros recibidos en su cuenta corriente”.
El fallo reitera la definición doctrinal y legal del contrato de mandato, específicamente, lo que se refiere a la rendición de cuentas y su finalidad.
Fuente: pjud.cl
